Sobre la alegría y el peso
Nunca me sentiré bien si no consigo adelgazar.
Si a ti también te condiciona tu peso de esa manera, no te sientas culpable. No eres superficial, no eres inmadura, y tampoco tienes que resignarte a vivir con un peso en el que no te sientas bien.
Lo que sí puedes hacer es decidir liberarte del sobrepeso de una manera diferente, atreverte a buscar más allá de las dietas y el sacrificio.
¿Y qué hay más allá? emociones como la alegría, que tienen mucho que ver con tu manera de actuar en relación al peso.
Por eso hoy quiero contarte cómo reconectar con la alegría puede ser definitivo para despedirte de los kilos de más.
¿Qué es la alegría?
La alegría es esa emoción que te empuja a vivir con entusiasmo, a mostrarte, a conectar con los demás, a disfrutar de lo que te gusta como si no hubiera un mañana y a ir con todo el ánimo a por lo que quieres en la vida.
La alegría está dentro de todas y cada una de nosotras. Nacimos con ella y forma parte de lo que somos en esencia.
Sin embargo, a medida que crecemos y nos relacionamos con los demás, comenzamos a escuchar opiniones sobre nosotras, sobre nuestro aspecto, nuestro cuerpo… y caemos en el error de empezar a compararnos.
Es entonces cuando sentimos que hay algo que no está bien en nosotras, que no somos suficientes… y nos vamos desconectando de nuestra alegría natural.
Con el tiempo se van sumando situaciones difíciles, preocupaciones, cargas y obligaciones que nos alejan más y más de esa alegría que un día tuvimos de manera espontánea y que ahora sentimos cada vez menos.

«La comparación es la muerte de la alegría» (Mark Twain)
Cómo recuperar tu alegría natural
La alegría de la que estoy hablando está en tu corazón y no depende de nada externo. Surge cuando vuelves a tomar conciencia de que eres suficiente, válida y merecedora por el mismo hecho de ser, de existir; cuando te das cuenta de que no tienes que cambiar nada en ti para ser querida, reconocida o aceptada, tanto por los demás como por ti misma.
Sólo tienes que recordar cómo te sentías cuando eras pequeña y ni siquiera te planteabas la posibilidad de no ser válida, ni por tu peso, ni por ninguna otra razón. Jugabas, reías, vivías y todo estaba bien como estaba.
Hay personas que al tomar conciencia de esto se sienten liberadas y conectan directa y profundamente con su alegría natural. Si no es tu caso, sólo tienes que despejar un poco más el camino, entender que el rechazo que una vez sentiste por parte de otros ya no existe y dejar atrás tu propio rechazo. ¿No te parece que estar viva es un motivo de alegría más que suficiente?
También te puede ayudar mucho empezar a valorar todo lo que tienes ahora y recordar los momentos, situaciones, lugares, actividades y personas que te conectan mejor con la alegría, para darles más espacio en tu día a día como algo prioritario, ¡vivir alegre no es sólo cosa de niños!

A más alegría, menos peso
No tienes que adelgazar para poder estar alegre, sino al revés. Volver a conectar con la alegría es lo que te ayudará a estar en el peso que quieres estar.
¿Por qué? porque si recuperas tu alegría natural, esa que va contigo de serie, tendrás el ánimo que ahora te falta para cuidarte sin sufrir, al tiempo que disfrutas de tu vida.
Al contrario, si te empeñas en seguir intentando adelgazar desde el desánimo que produce no sentirse válida, es probable que sigas cosechando malos resultados, porque tus emociones no te impulsarán a actuar en línea con lo que quieres.
De modo que, para liberarte de los kilos, deja de preocuparte por lo que debes comer o por cuánto deporte tienes que hacer, y vuelve a dedicar tiempo a lo que de verdad te gusta, pasa tiempo con las personas con las que te ríes y conecta plenamente con lo que te hace sentir bien en la vida, sin más objetivo que este: ¡recuperar tu alegría!

Excelente artículo, Ana. Sí es cierto, la alegría interna en nosotros es algo importante para conseguir nuestros objetivos. Y por supuesto, también para adelgazar uno requiere sacar fuerzas desde adentro lograrlo. Sin embargo, me preguntó cómo puede uno lograr esa alegría interna, cuál es el proceso para tenerla. Gracias Ana.
Hola Jairo!!
Hay muchas maneras de reconectar con nuestra alegría… te voy a comentar tres que me parecen muy eficaces:
1) Recordar aquellos momentos de alegría que has tenido a lo largo de tu vida, y revisar qué es lo que te aportaba esa alegría entonces, para tratar de traerlo de nuevo a tu vida… para algunas personas son lugares concretos, o la actividad que hacían, las personas que les acompañaban… por alguna razón aquello se quedó en el camino y se trata de recuperarlo, en la medida de lo posible.
2) Escribir todo lo bueno que hay hoy en tu vida. Haz un listado y empieza a ser consciente de todo eso que no solemos valorar, pero que si de repente perdiéramos nos dolería mucho. Todos tenemos más motivos para la alegría de los que creemos! :)
3) Si te sientes mal por cosas que ocurrieron hace tiempo, revisa la historia que te estás contando acerca de tu vida. Es muy común hacer valoraciones muy negativas de lo que nos pasó, que hacen que esas cosas nos sigan pesando hoy… si cambias la manera de ver tu propio pasado, si lo mirás más objetivamente y te detienes a valorar lo bueno que también has vivido, te resultará más fácil soltar esa carga y empezar a vivir más ligero.
Espero que estas ideas te ayuden!! :)
Un abrazo!