Todo lo que el hambre sabe de ti (y cómo ponerlo a tu favor)
¿Tienes la sensación de que siempre tienes hambre? si estás agobiada por eso, hoy vengo con tres grandes noticias para ti:
- Tener hambre es una clara señal de que estás viva, y eso es muy de agradecer en los tiempos que corren.
- Todo lo que sentimos nos trae un mensaje. El hambre también.
- Cuanto más hambre tengas, más apasionante es el mensaje que tienes que escuchar.
Yo sentía hambre a todas horas y lo pasaba muy mal, porque no tenía salida: o me lanzaba a la comida, y después me sentía peor, o me esforzaba en no caer en la tentación. Pero era inútil… tarde o temprano, siempre perdía.
Un día me di cuenta de que esa constante sensación de hambre, quería decirme algo. Cuando dejé de enfadarme por sentirla, pude escuchar el mensaje que tenía para mí y entendí lo que me pasaba realmente.
Por si te sirve a ti también, en este post voy a contarte cómo poner a tu favor todo lo que el hambre sabe de ti.

Si sientes hambre a todas horas, la respuesta no está en la comida
Cualquier tipo de carencia puede provocarte hambre
Puedes tener hambre de seguridad, de amor, de libertad, de cariño, de experiencias, de compañía, de ti misma, de una vida más plena, de divertirte, de ilusiones, de descansar, de dedicarte a algo que de verdad te llene, de desconectar… todo lo que te haga sentir que te falta algo, puede llevarte a comer de más.
Detrás de una persona con hambre constante, hay una conciencia despertando. Algo dentro de ti te dice que ya está bien, que dejes de conformarte, que te mereces una vida mejor más allá de los problemas de peso y el agobio por los kilos. Que no has nacido para eso, y que el tiempo que le has dedicado ya ha sido suficiente.
«No somos cubos vacíos que hay que llenar, sino fuego que hay que encender» Mario Alonso Puig
El hambre sabe mucho acerca de lo que en realidad te importa, y te lo está mostrando para que te ocupes de ello. Aprovecha la oportunidad que te da para poner esa información a tu favor, y ocuparte de lo que te pasa verdaderamente. Mientras, olvídate de la comida. Si necesitas comer, hazlo. Y luego ve más allá. Porque si estás agobiada por la comida, no podrás ver eso que tanto necesitas atender de ti.
Pierde miedo al hambre, porque ahora ya sabes que no es una amenaza para ti. Es el momento de agradecerle su aviso y de hacerte cargo de la situación. Sólo tienes que pasar algo de tiempo contigo misma y preguntarte: ¿qué es eso que me está provocando un vacío tan grande?; ¿qué siento que necesito en mi vida en este momento?; ¿qué tendría que cambiar para sentirme mejor?
Hazte preguntas sin miedo, con curiosidad por saber más de ti, y trata de llevar tu atención hacia dentro, porque la respuesta no está en tu cabeza, la tiene tu corazón.

Si ves que te resulta complicado hacerlo sola, te animo a conocer mi programa online AMA VIVE COME, para que valores si puede ser una buena opción para ti. Es un curso de desarrollo personal para salir de la trampa del peso, en el que te explico, paso a paso, todo lo que necesitas saber para superar de una vez los problemas de peso y ansiedad por la comida. Además, contarás con mi apoyo, en todo momento, a través del grupo cerrado de Facebook del curso. ¡Allí nos vemos!